Hasta anoche en Washington, el salvataje financiero prometido por Donald Trump a Javier Milei tendría la siguiente forma:
- Swap de 20.000 millones de dólares integrado -en su mayoría- por los Derechos Especiales de Giro (DEG´s) que el FMI entregó a la Secretaría del Tesoro de los Estados Unidos.
- Compra de bonos durante octubre para estabilizar los mercados y bajar el riesgo país.
Pero ésta ingeniería financiera del salvataje enfrentaría ciertos dilemas técnicos:
- Quién compra los DEG´s de Estados Unidos a cambio de dólares.
- Una vez que la Secretaría del Tesoro envía al Banco Central de la República Argentina esos 20.000 millones de dólares para la compra de los bonos, cómo hace la autoridad monetaria para girarlos al Ministerio de Economía.
Los DEG´s de Estados Unidos podrían ser comprados por la Reserva Federal (FED), y Caputo tendría la posibilidad de acceder a los USD 20.000 millones depositados en el Banco Central, con una Letra Intransferible.
Al margen de los detalles técnicos, la administración republicana y el gobierno de la Libertad Avanza trajinan distintas hipótesis de trabajo para evitar que la oposición en los parlamentos de cada país traben el salvataje que despliega Trump a favor de Milei.
“Trump realmente quiere hacernos creer que no hay suficiente dinero para arreglar las primas de atención médica de la ACA (Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio), no hay suficiente dinero para los controladores aéreos, ¿¡pero de alguna manera hay US$20.000 millones disponibles para rescatar a la Argentina?!“, escribió Chuck Schumer, influyente senador demócrata, en su cuenta oficial en X.
El Congreso de Estados Unidos no tendría facultades explícitas para trabar el salvataje a la Argentina, pero la bancada demócrata del Senado explora antecedentes jurídicos destinados a quebrar el acuerdo que negocian Caputo y Bessent.
De todas maneras, por la Mexican Debt Disclosure Act aprobada en 1995, Trump y Bessent deberán informar al Capitolio sobre el salvataje financiero para la Argentina.