El consumo de los hogares en Argentina tuvo en junio una caída del 9,8% respecto al mismo mes del año pasado, el peor retroceso desde la pandemia, y del 3,3% contra mayo, según el indicador que realiza la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC). La pérdida del poder adquisitivo, que se profundizó con la devaluación de diciembre, implicó en que el primer semestre finalizara con un retroceso del 5,3% interanual.
El Gobierno de Javier Milei tiene como principal objetivo apuntalar la baja de la inflación y que los salarios se recuperen gradualmente, un proceso de mejora que por ahora es incipiente. Es por eso que las empresas y los analistas anticipan que la recuperación del consumo, que representa más del 70% del PBI, será un proceso lento.
La CAC estimó un ingreso nominal promedio por hogar de $1.188.000 en junio último. Ese ingreso implica una caída de 21% en su poder de compra respecto a los niveles del año pasado. lo que obliga a las familias a recalcular sus gastos y ajustar el cinturón en todos los rubros, pero más en los que no son considerados esenciales.
“Asimismo, continuó la tendencia negativa en la compra de indumentaria y recreación (pero en menor medida que el mes anterior), lo cual sostiene la idea de la reestructuración del gasto de las familias. Otro punto negativo del mes, fue la fuerte caída en el gasto asociado a vivienda, alquiler y servicios públicos, impactado fuertemente por la baja en la demanda de energía eléctrica”, resaltó la entidad.