La pobreza en la Ciudad de Buenos Aires (CABA) alcanzó al 28,1% de la población en el tercer trimestre de 2024, según el último informe de la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad. Esto equivale a 868.000 personas, de las cuales 341.000 -el 11%- viven en situación de indigencia. Estas cifras representan un aumento significativo en comparación con el mismo período de 2023, cuando la pobreza afectaba al 15,8% de los hogares y al 10,1% de las personas.

Incremento histórico: los datos más altos desde 2015

El informe revela que estos son los datos más elevados desde que comenzó la serie estadística en 2015. Entre los factores más preocupantes destaca el aumento de hogares que no logran cubrir una canasta básica de alimentos, situándose en el 33% del total. Además, el 42,6% de los niños, niñas y adolescentes menores de 17 años vive en hogares pobres, un incremento respecto al 41% registrado en 2023.

Factores detrás del deterioro social

El aumento de la pobreza está estrechamente vinculado con la incapacidad de los ingresos laborales y no laborales para hacer frente al alza de los precios. "La expansión de los ingresos resulta insuficiente para compensar los aumentos de precios, lo que deteriora las condiciones de vida de los hogares y afecta el acceso a las canastas básicas", señala el informe. Este escenario también ha reducido la proporción de sectores acomodados y de clase media en la Ciudad.

Los más afectados por la pobreza en CABA

Algunos grupos poblacionales y geográficos muestran una mayor incidencia de pobreza en el último trimestre:

Hogares encabezados por mujeres: La pobreza afecta al 26%, frente al 22,9% en hogares liderados por hombres.

Zona sur de la Ciudad: La pobreza asciende al 35%, siendo la más afectada geográficamente.

Hogares con niños menores de 14 años: El 35,6% de estos hogares está en situación de pobreza.

Adultos mayores: La incidencia es menor, con un 16,7% en situación de pobreza.

Transformaciones en las clases sociales

La contracción de la clase media y los sectores acomodados también es notable. Los hogares clasificados como "clase media" representan el 46,1% de la población, marcando un retroceso histórico. Los sectores acomodados también disminuyeron, con un 8,1% de los hogares y un 6,4% de las personas pertenecientes a este grupo.

En contraste, los sectores vulnerables y el "sector medio frágil" -aquellos que están en la línea entre la vulnerabilidad y la clase media- han aumentado su participación. Estos últimos representan el 10,6% de los hogares y el 9,3% de las personas en la Ciudad.

En comparación con el trimestre anterior, hubo una reducción significativa en el número de hogares en situación de pobreza, con una disminución de 4,3 puntos porcentuales. Sin embargo, estas mejoras no logran compensar el deterioro generalizado respecto al año pasado.

La crisis social que atraviesa la Ciudad de Buenos Aires refleja un deterioro constante en las condiciones de vida de miles de habitantes, especialmente en los sectores más vulnerables. Las políticas públicas deben centrarse en garantizar ingresos suficientes para enfrentar la inflación y mejorar el acceso a recursos básicos. Este es un momento crucial para implementar medidas que reduzcan las desigualdades y protejan a las familias de caer en la pobreza extrema.

Si bien se han registrado avances en algunos indicadores, la tendencia general es preocupante. Es fundamental que tanto el gobierno local como el nacional trabajen en conjunto para revertir estas cifras y garantizar una mayor equidad social en una de las ciudades más importantes de Argentina.

 
Send

TE PUEDE INTERESAR