El Banco Nación destinó un 373% más en abril de este año respecto al mismo período de 2023 a la asistencia financiera a MiPyMEs, grandes empresas y a miles de clientes del segmento individuos de todo el país.
En cifras puntuales, se pasó de unos $170 mil millones a más de $807 mil millones, lo que permitió generar condiciones operativas para ampliar la actividad económica en la Argentina.
Su presidente, Daniel Tillard, insistió en que "nuestra vocación es volver a prestarle a las familias y a las PyMEs, mejorar la oferta, adaptarla a sus demandas y necesidades. Este es el comienzo de la transformación del banco en una entidad más competitiva".
Esta idea va en línea con los deseos del ministro de Economía, Luis Caputo, quien el lunes en su exposición en Fundación Mediterránea sostuvo que "hay que bajar la inflación para que baje la tasa y los bancos pueden volver a trabajar como bancos".
El titular de Hacienda detalló que "los últimos años los bancos eran intermediarios entre la gente y el tesoro", y la realidad es que "el Gobierno no tiene que captar depósitos, los tiene que captar el banco y dárselos a la gente en forma de créditos", afirmó.