Hay días grises en donde no estás al 100 % con las pilas, das vueltas en la habitación, te probas mucha ropa y nada te convence; elegís algo que zafa, pero no estas super convencida, el reloj te apura porque ya estas llegando tarde y salís con algo que no te convence ¿Te pasó?
El día pasa y a veces no mejora por más actitud que le pongas y aunque soy de tratar de ver lo lindo en todo lo feo, hay días que no puedo y por aquí va la cuestión. Me paso al usar por sexta vez un tapado negro muy abrigado que dejo para ocasiones invernales que ameritan. Todo el día estuve de mal humor, no quería salir a la calle por el frío y porque sabía en el fondo que me pondría ese tapado que me apaga y no me favorece, pero por “necesidad” (excusa encubierta) lo uso.
Mi día laboral terminó y de regreso a casa me miraba en cada reflejo que encontraba como buscando aprobación divina para conservarlo, llegué a casa y al despojarme de él lo sentí, fue como sacarme un peso de encima.
Tuve una epifanía. “El Negro por más que le dé vueltas no es mi color, no está en mi colorimetría “.
(Estudio de los colores a fin de comprobar cuáles van mejor teniendo en cuenta nuestros propios rasgos y características como el tono de piel, el color de ojos y cabello.)
El negro va solo con la paleta invernal, pieles claras como las orientales o negras, de cabello negro, castaño oscuro, rojizo y gris, ojos negros o azules.
Al día siguiente, el mismo frío… pero esta vez con mi ingenio de asesora y mejor humor, me vestí con colores con los que me siento yo, que van con mi colorimetría y me iluminan el rostro. Casi un total White, tapado crema, pantalón blanco, chalina al tono, botas suela y cartera suela. Un look super clásico, elegante invernal, enérgico, calmo, con el que me siento yo misma y así con un solo cambio de color, al color acertado transforme mi día por completo y ayudo a encarar el frio de otra manera.
Te dejo unos Jime Tips para descubrir de manera exprés que tonos van con vos:
● Ponte frente al espejo
● Proba la prenda de color, cerra y abrí los ojos.
● Si la mirada va hacia tu cara, ese color, atrae luz.
● Si la mirada va hacia otra parte de tu cuerpo no es tu color.
Recorda que no hay belleza propia sin el color correcto. ¡descubrirlo!
