La vicepresidenta Victoria Villarruel compartió este domingo un acto oficial con el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, con motivo del "Día del Héroe Formoseño", al cumplirse 50 años de la defensa del Regimiento de Infantería Monte 29. El encuentro, que reunió a una figura central del oficialismo libertario con uno de los referentes históricos del peronismo, dejó una postal llamativa en el escenario político nacional. Todo esto mientras se desataba a nivel nacional otro capítulo del escándalo con José Luis Espert, quien finalmente renunció a su candidatura.
Durante la ceremonia, que se desarrolló en la capital provincial, Insfrán encabezó el homenaje a los soldados y policías que defendieron el cuartel militar durante el ataque de 1975. "Nuestro más sentido homenaje a los combatientes que ofrendaron su vida en cumplimiento del deber", expresó el mandatario.
En sus redes sociales, el gobernador compartió una fotografía junto a Villarruel en el palco oficial, gesto que fue interpretado como una muestra de respeto institucional pese a las diferencias políticas.
Por su parte, la vicepresidenta publicó un mensaje en X (ex Twitter) donde destacó el coraje de los combatientes: "En el Regimiento había jóvenes conscriptos, oficiales y suboficiales que fueron atacados con alevosía y premeditación, pese a lo cual defendieron con heroísmo su unidad militar".
Villarruel agregó: "A 50 años de aquel ataque, mi respeto a los héroes caídos, a sus familias y a todos los que ofrendaron su vida en cumplimiento del deber. En este aniversario me uno al Día del Soldado Formoseño para rendir homenaje a los valientes hijos de esta provincia".
La vicepresidenta, que ha convertido la reivindicación de las Fuerzas Armadas y de las víctimas del terrorismo en uno de los ejes de su gestión, acompañó al mandatario formoseño a pesar de que este se mantiene entre los gobernadores más críticos de la Casa Rosada.
Analistas políticos interpretaron su participación como un gesto de distensión en medio del clima de confrontación entre el Gobierno nacional y los mandatarios del norte argentino, donde persisten tensiones por los recortes de fondos y la política fiscal del Ejecutivo.
Días antes, Villarruel había recordado también en X el 52º aniversario del asesinato del sindicalista José Ignacio Rucci, ex secretario general de la CGT, perpetrado por Montoneros en 1973. En su mensaje, lo definió como "un hombre de convicciones firmes" y subrayó que su muerte "buscó golpear al movimiento obrero y desestabilizar al gobierno".
"Acompaño a su familia en el dolor y reafirmo mi compromiso con la verdad, la justicia y la defensa de la Patria frente a la violencia y todo acto de terrorismo", escribió la titular del Senado, quien dedicó un párrafo a Claudia Rucci, ex funcionaria suya en la Cámara Alta.
Villarruel cerró su homenaje con un mensaje que sonó a crítica hacia el presidente Javier Milei: "Nunca hice distinciones entre las víctimas porque todas merecen el abrazo del pueblo argentino. Y hoy más que nunca debemos trabajar por la unión nacional que nos permita recuperar la Argentina grande y soberana que tuvimos".
