Hacia fines del siglo XIX, Eugenio Bustos cambió su mejor caballo por unas vides de Malbec y con ese simple y arriesgado acto, no sólo comenzó a escribir la historia de bodega La Celia, fundada en 1890, sino que también marcó el camino de la que se convertiría, con el correr de las décadas, en una de las regiones vitivinícolas más importantes de la Argentina: Valle de Uco.
Pasó el tiempo y con la misma pasión de siempre, la bodega presenta La Celia Elite Pinot Noir 2023, su primer varietal de esta cepa que viene posicionándose con fuerza en el país como sinónimo de vinos sumamente sofisticados y elegantes.
La uva con la que se elabora esta etiqueta proviene de La Consulta. Andrea Ferreyra, jefa de enología de La Celia, explicó durante el lanzamiento que "nosotros estamos dentro de una zona privilegiada para la elaboración de vinos de alta gama, con un viñedo propio, del año ‘94 que ya ha logrado su equilibrio y su madurez y esto queríamos contar con este vino, las bondades y cualidades de este terroir".
Si bien la composición de los suelos es la misma, -mayormente aluviales, con algunas contribuciones de suelo calcáreo -, al estar a distintas alturas y con perfiles variados, los vinos se van a expresar de manera diferente.
La finca cuenta con cinco hectáreas de un Pinot Noir clon 777, "una uva espectacular, de baja productividad y alta acidez; es una uva muy delicada y de excelente esqueleto polifenólico que da como resultado vinos con mucha elegancia y personalidad", detalló la enóloga.
Originaria de la región francesa de Borgoña, el Pinot Noir es una de las variedades más desafiantes, "tiene todo para salir mal, un racimo con forma de piña, de uva chiquita, de piel fina y bayas compactas, muy delicada, y que, en esta zona, al ser muy distante en términos climáticos del lugar de origen (humedad, temperatura y demás), alcanza la madurez más rápido, lo cual exige ser muy precisos en el momento de la cosecha", explica, "pero es una variedad que nos apasiona".
Luego de la cosecha manual, La Celia Elite Pinot Noir tuvo una vinificación en tanques de acero inoxidable, pasó 11 meses de crianza en fudres y vasijas ovoides de concreto y nueve meses de estiba en botella antes de su lanzamiento. El resultado: un vino de color rojo liviano, típico de la variedad donde a nivel aromático predominan los frutos rojos, como la grosella y la frambuesa, y tiene sutiles notas herbales. En boca tiene una entrada filosa, con taninos que brindan una sutil textura de tiza, como resultado de la interacción de la variedad con el terroir.
"Queremos sembrar una semillita como hicimos en el pasado con el Cabernet Franc", dijo Ferreyra, quien agregó que "luego vinieron un montón de bodegas que elaboran vinos Cabernet Franc maravillosos y que le hace muy bien a la categoría, porque nos permite salir un poco del Malbec para desarrollar otra cepa que, además, funciona muy bien con el Malbec".
El cultivo de Pinot Noir fue creciendo en los últimos años, aunque solo representa un pequeño porcentaje del total de uva plantada en el país y se destina en su mayoría, a la elaboración de espumantes. Pero, de la mano de más consumidores que buscan vinos delicados y disfrutan de la elegancia y la expresión distintiva de este varietal, más bodegas están apostando a su desarrollo, como La Celia, que está empezando a marcar el estilo de la variedad en La Consulta.
