Luego de varios meses de un largo proceso de investigación, Felipe Massa sigue luchando para que lo reconozcan como campeón mundial de Fórmula 1 en 2008. El piloto brasileño reclama que se anule el resultado del Gran Premio de Singapur de ese año, que estuvo marcado por el Crashgate, el escándalo más grande en 74 años de la Máxima. Los puntos que sumó en su entonces rival, Lewis Hamilton, le permitieron consagrarse en la última fecha disputada en Interlagos, San Pablo, la casa del corredor paulista presentó su carta más fuerte en la Justicia británica.
Este lunes los abogados de Felipinho registraron en el Tribunal Superior de Justicia británico (High Cout of Justice), una denuncia contra la Federación Internacional de Automóvil (FIA) y Bernie Ecclestone, quien en esa época era el CEO de Formula One Management (FOM), la empresa que es dueña de los derechos comerciales de la categoría.
“El Sr. Massa está buscando declaraciones de que la FIA rompió su normativa al no investigar adecuadamente el accidente de Nelson Piquet Jr. en el GP de Singapur 2008 y que actuó a propósito. El Sr. Massa habría ganado el título ese año. También busca reparar los daños por las significativas pérdidas económicas que sufrió debido al fallo de la FIA, del que el Sr. Ecclestone y la FOM fueron cómplices también. Los intentos de encontrar una resolución amistosa no han tenido éxito, por lo que dejan al Sr. Massa sin otra opción que iniciar acciones legales”, aseguró mediante un comunicado el despacho de Vieira Rezende Advogados.
También tomaron como ejemplo los manejos que tiene el actual presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem: “Los eventos recientes naturalmente demuestran que esos problemas de transparencia e integridad en la F1 siguen siendo relevantes y está claro que se necesita trabajar para restaurar la credibilidad y el futuro a largo plazo”.
Massa reclama que sea considerado campeón mundial de aquella temporada en la que corrió para Ferrari y además un resarcimiento económico que oscilaría los 60-150 millones de libras (76,8-192 millones de dólares). En una entrevista con Infobae el año pasado, el corredor de 42 años, que en la actualidad compite en el Stock Car de su país, afirmó que “seguramente en la lucha hay dinero que reclamar. Pero baso el reclamo en el campeonato. El trofeo es lo más importante para mí”.