En medio de un creciente conflicto sindical, el presidente Javier Milei confirmó a sus allegados que el Banco de la Nación Argentina no se privatizará en su totalidad. Pese a que su presidente Daniel Tillard comenzó el proceso para convertirlo en Sociedad Anónima, el Estado mantendrá siempre el control de al menos el 51% de las acciones, pero cotizará en la Bolsa de Valores.
"El Banco Nación no se privatizará en su totalidad. Es un banco que le sirve al país y a la Nación porque es muy rentable y está muy bien manejado por una línea técnica que es idónea", dijo un alto funcionario libertario.
Sin embargo, confirmó que "hemos comenzado el proceso para convertirlo en Sociedad Anónima" tal como ordena el DNU 70/2023 que está vigente pese a que lo rechazó el Senado hace dos semanas y lo debe tratar la Cámara de Diputados.
De ese modo, se abriría su composición accionaria a inversores privados y a accionistas que podrían comprar y vender los activos en la Bolsa de Valores. "El Banco Nación debería cotizar en la Bolsa", señalan los funcionarios de la Casa Rosada. El tope de acciones para los privados sería del 49%, pero se comenzaría progresivamente por porcentajes más bajos, del 10 o del 20%, que irían creciendo.
Alerta gremial
En estos últimos días, los pasillos internos del Banco Nacion están empapelados con afiches que en letras enormes dicen "El Nación no se vende". La misma consigna decian los folletos que el sindicato de La Bancaria repartió en la Plaza de Mayo en la marcha del 24 de marzo, el domingo último.
En las 739 sucursales del país, de las que viven 17.000 familias, los dirigentes que responden al sindicalista bancario Sergio Palazzo comenzaron a denunciar al presidente Milei por la eventual privatización. Pero altas fuentes del Gobierno lo descartaron . "Si queremos que sea una SA y que cotice en Bolsa para que tenga todo el control del management", señalaron las fuentes.
En las oficinas del banco muchos directivos nombrados por Milei comenzaron a conocer a la línea dirigencial estable de la entidad y quedaron con una excelente impresión profesional y técnica.
"El Banco Nación tuvo una rentabilidad de 1400 millones de dólares y mejor manejado podría ser mucho más", señalaron funcionarios cercanos al jefe del Gabinete, Nicolás Posse, cuya función es analizar las posibles privatizaciones del decreto 70. No piensan lo mismo por ejemplo de Aerolíneas Argentinas.
Un esquema similar al de YPF
Por otra parte, lo que se busca para el Banco Nación es un "esquema parecido al de YPF, otra de las empresas que no hará falta privatizar porque genera muchos dólares".
Todavía no están los detalles de la nueva conformación pero algunos directivos del Banco Nación imaginan un banco que se ponga al servicio de todas las Pymes del país, que respalde a la producción nacional y que tenga préstamos a plazos cortos a alta tasa para inversores privados.
Incluso, merodea la idea de no desprenderse de las más de 700 sucursales del interior, pero destinar sus inmuebles a compartirlas con otros negocios de consumo masivo para maximizar la rentabilidad de los privados y del Banco.Mientras tanto, los trabajadores del Banco Nación denunciaron avances hacia la privatización.
Durante la marcha por el 24 de marzo en Plaza de Mayo, el sindicato de La Bancaria denunció que el Presidente Javier Milei avanza rápidamente con la privatización de la entidad financiera. El titular del Ejecutivo puso al Banco en la lista original de 41 empresas sujetas a privatización.
La preocupación de los trabajadores del Banco Nación
En un comunicado, que expresó "El Nación no se vende", los trabajadores del Banco expresaron: "Queremos acercarles nuestra preocupación ante la intención del Gobierno de privatizar el banco". Señalaron que "con esta intención no solo se afectan miles de puestos de trabajo, sino que además perdemos todos los argentinos la única herramienta del Estado nacional que está presente a lo largo y ancho del país".
"La herramienta financiera de todos y todas, que permite impulsar el desarrollo económico y federal de cada una de nuestras regiones", continúa el texto. De todos modos, en la Casa Rosada aseguraron que los objetivos del Gobierno y de Milei son los mismos: que el banco sirva como un banco, sólo que el Presidente quiere que hasta el 49% quede en manos privadas para tener un gerenciamiento con más control.
Los trabajadores subrayaron que el banco "acompaña con préstamos a pymes, a nuestras grandes empresas, a nuestros monotributistas, a nuestras familias, jubiladas y jubilados". Desde Balcarce 50 señalaron que coinciden en ese planteo.Sin embargo, en la Casa Rosada también señalaron que "en este momento La Bancaria y Palazzo están en una postura política apuntalados por el peronismo en contra de Milei". Señalan que existen otros motivos por los cuales Palazzo y los sindicalistas se plantean en posturas extremas.
Desde el sindicato señalaron en forma extraoficial que el Presidente habilitó a su asesor Federico Sturzenegger a tomar contacto con los directivos de la entidad pública para instruirlos sobre la transformación en una sociedad anónima.
"El directorio del Banco informó que se está avanzando en realizar una sociedad anónima y es el primer camino que habilita a la privatización. Entonces, desde La Bancaria, a nivel nacional, se colectan firmas en todas las sucursales del país para juntar un millón y medio de firmas y con ese aval ir a la Cámara de Diputados para presentar un proyecto de ley", comunicó Damián Dumé, dirigente de la sucursal Paraná.
Señaló que no se sabe por ahora qué pasará, pero por la experiencia del Banco Entre Ríos, dijo, "hubo muchos despidos y retiros voluntarios". En la Casa Rosada aseguran que esta será otra historia y que Milei ya no piensa en privatizar la entidad bancaria.