Un equipo de la Casa de Catamarca en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) se encuentra realizando un relevamiento de locaciones en el norte de la provincia, específicamente en las zonas de Cerro Negro, Salado y Copacabana. El objetivo es identificar construcciones de adobe que se encuentran fuera del circuito turístico conocido como “La Ruta del Adobe”, ubicado entre Tinogasta y Fiambalá.

El proyecto, liderado por Adolfo Quiroga, responsable de eventos de la Casa de Catamarca, Adrián Veaute, referente de Cultura, y la artista María Elena Jalil, busca integrar textiles y cerámicas en una intervención artística que resalte el ritual como esencia de la vida comunitaria. La iniciativa está prevista para la primera mitad del próximo año y contará con un registro fotográfico y audiovisual para documentar y preservar el proceso.

El trabajo cuenta con el apoyo del diputado Sebastián Nóblega, del intendente Ernesto Andrada, del secretario de Turismo Martín Irazu y de un equipo de colaboradores. Se espera que este proyecto contribuya a la revitalización del patrimonio cultural de la región y a la promoción del turismo en áreas menos conocidas.

La Ruta del Adobe

La Ruta del Adobe en Catamarca es un circuito de 50 km que avanza por la RN 60 entre las localidades de Tinogasta y Fiambalá. El recorrido enlaza antiguas construcciones puestas en valor que aparecen en las diferentes localidades que jalonan el circuito. En su mayoría se trata de una serie de edificios históricos de la arquitectura colonial, algunos de los cuales fueron declarados Monumento Histórico Nacional.

El denominador común es el adobe, un material que usaron algunos pueblos originarios de América y que los españoles eligieron para hacer muchos de sus edificios durante los años de la colonización.

Send

TE PUEDE INTERESAR