Nunca me sentí cómoda con la idea de establecer contactos, al menos en el sentido convencional de la palabra. Soy introvertida y no fui capaz de descifrar el arte de entrar y salir de las conversaciones durante, por ejemplo, un cóctel en una reunión. Prefiero mantener una larga conversación con una sola persona, por lo que mi estrategia por defecto es detectar a otro introvertido y acercarme a él.

Pero, por supuesto es importante crear una red. Tu trayectoria profesional, después de todo, va a estar determinada tanto por la gente que conozcas como por el trabajo que hagas. Sobre todo si sos ambicioso. 

"Cuando se habla de llegar a los niveles más altos, se trata menos del trabajo y más de la red, de tu impacto y de cómo comercializás y marcás aquello en lo que estás trabajando", dijo Mary Elizabeth Porray, vicepresidenta adjunta global de tecnología de clientes de EY, la consultora. "Así que asegurate centrarte un 50% en lo que sabés y un 50% en quién conocés".

Acá tenés algunas ideas que me funcionaron bien a lo largo de los años:

Investigación de 60 segundos

En mi trabajo, conozco a mucha gente nueva, sobre todo en videollamadas. Siempre tengo el hábito de tomarme un minuto antes de que empiece la presentación para comprobar el perfil de LinkedIn de la persona y sus feeds de redes sociales. Busco cosas que tengamos en común. Quizá pasaron unos años trabajando en periodismo al principio de su carrera. O quizá sean originarios de Canadá, como yo. O tal vez fueron a la escuela en Nueva Orleans, donde vivo ahora.

Esos puntos de interés o antecedentes compartidos ayudan a crear conexiones instantáneas. Lo mejor de todo es que se sienten auténticos, en lugar de forzados. Hago esto con casi todas las personas que voy a conocer en un contexto de negocios, y siempre me intriga por qué más gente no hace lo mismo. El retorno de la inversión de esos 60 segundos de búsqueda es enorme.

 

Trabajar juntos en algo

Para mí, la mejor manera de construir una relación duradera con alguien es trabajar en lo que sea con alguien, en lugar de limitarte a compartir un café, una bebida o una comida. Por ejemplo, las empresas siempre están formando comités para trabajar en alguna nueva iniciativa. Levantá la mano. Demostrá a tus colegas lo que sabés hacer, causá buena impresión y sé fiable. Hacé como si te presentaras a una audición para un nuevo puesto de trabajo. Impresioná a la gente y puede que piensen en vos cuando se abra una vacante.

Cada vez más empresas están poniendo en marcha plataformas internas de trabajo para que los trabajadores puedan moverse y adquirir nuevas habilidades. Aprovechalas y construí tu reputación como un jugador de equipo fiable. Y mirá también afuera. Las asociaciones del sector ofrecen grandes oportunidades para establecer contactos. O unite a una organización sin fines de lucro. 

¿Sentís que no tenés tiempo?

Recordá que el trabajo tiende a expandirse en el tiempo que tenés para hacerlo, así que esas otras reuniones pueden actuar como funciones de forzamiento para conseguir que trabajes de forma más inteligente y centrada en tu trabajo diario.

"Un plan de juego para el éxito"


Escuché por primera vez esta frase memorable - "salir a jugar para ganar"- de Joseph Plumeri, que era CEO de Willis Group Holdings, un broker de seguros, cuando lo entrevisté. "Todo lo que hice empezó porque 'salí a jugar' y algo ocurrió", me dijo Plumeri. "Significa que si uno mismo se empuja ahí fuera y ve a la gente y hace cosas y participa y se involucra, algo ocurre", agregó.

Y eso no significa que digas que sí a todo. Establecé un marco útil para lo que se apunta y lo que se rechaza, porque el "no" es una palabra importante que debés sumar a tu vocabulario. 

Para mí, el filtro simple siempre fue, ¿está esto direccionalmente en línea con o hacia dónde quiero ir? Si ampliase mis habilidades como periodista (al principio de mi carrera) o si aprendiera más sobre liderazgo (el capítulo actual de mi carrera), mi opción por defecto era y es decir que sí. 

Supuse que aprendería algo nuevo y quizá ampliaría mi red de contactos, y ahora tengo suficientes años a mis espaldas para ver el beneficio de salir a jugar.

Send

TE PUEDE INTERESAR