Es de un color negro medianoche, con una densa trama de fruta primaria, aromas florales y vegetales, casi como un oporto, a pesar de haber pasado un período en roble y tener ya cuatro años. Esa misma exuberancia y carácter emocionante se manifiestan en el paladar, con taninos increíblemente perfumados y una acidez saturada de fruta. Pero aquí está el detalle: no hay calor, exageración, exceso ni cansancio para el bebedor. El vino es más bien hábil, flexible, suntuoso y sumamente bebible: una magnífica elaboración vinícola trabajando con una fruta excepcional” cita la revista de norteamérica.
Finca Flichman es una de las bodegas más antiguas y prestigiosas de Mendoza, Argentina, cuya historia se remonta a su fundación en 1910. Desde 1998, la bodega forma parte del grupo portugués Sogrape.
La bodega posee viñedos en dos de los terruños más destacados de Mendoza: Barrancas, Maipú, considerada una de las primeras zonas vitivinícolas de Argentina, y en Tupungato, Valle de Uco, una región reconocida por el cultivo de viñedos de gran altitud y características climáticas excepcionales para la producción de uvas de alta calidad.
Finca Flichman se dedica a la elaboración de vinos que cuentan su historia en cada copa. Su legado, cuidadosamente preservado y perfeccionado a lo largo de los años, se traduce en experiencias únicas y memorables para los apasionados amantes del vino.