Equipos de Pastoral Social del NOA de la Iglesia Católica advirtieron durante el Día Internacional de los Trabajadores sobre la "preocupante" situación generada por "la ola de despidos de trabajadores, que parece no tener fin". Reunidos a instancias del Episcopado Argentino, la Pastoral Social produjo un documento en el que plantearon "que se promueva la cultura del trabajo en nuestros ámbitos del NOA como medio de realización personal y de ascenso social".
En este sentido, manifestaron una serie de "principios superadores": "El trabajo no es ante todo una mercancía, su valor no le viene en primer lugar de la ganancia económica, sino de la persona que lo realiza; que detrás de cada puesto de trabajo hay una persona humana con deberes y derechos y posiblemente una familia que está a su cargo; que en el centro de la economía social y humanista están las necesidades básicas de la persona y no los números; que en una sociedad organizada el Estado no puede desentenderse de regular para que haya una distribución equitativa de las cargas y beneficios y de que no se puede dejar todo en manos del mercado".
Por ello, instaron a las autoridades "a revisar las políticas públicas que atenten contra el mantenimiento y la seguridad del empleo genuino" y pidieron que "el camino a seguir sea constructivo con elaboración de planes y proyectos de gobierno que generen nuevos y numerosos puestos de trabajo duraderos, bien pagos y que dignifiquen al trabajador.
